Si tenéis una celebración especial, os apetece regalar una fotografía a los invitados y no queréis que sea lo de siempre.
Hoy os traigo algo poco visto, y que como detalle, en este caso de Comunión, hará que sea recordado para siempre.
La impresión sobre pizarra.
La foto va impresa directamente en la pizarra, en un tamaño de 15x15 cm y a la que finalmente se le aplica un barniz para su conservación.
Se entrega con el soporte para colocar en sobremesa y la caja de regalo para que no tengas que preocuparte de nada.
¿No es una idea genial?